
El turismo de Semana Santa llega esencialmente a embriagarse.
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- El turismo de bajo perfil que sólo llega a embriagarse.
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Por Miguel Ángel Ocaña Reyes
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Ya sea de noche o de día, en el malecón, la calle o la playa, Puerto Vallarta se convierte en el periodo vacacional de Semana Santa en una súper cantina, y no obstante que la policía municipal se encuentra a todo lo que da en un esfuerzo por mantener el orden, el turismo de bajo perfil continúa haciendo lo que no hacen en sus lugares de origen, en este destino de playa.
Y es que la realidad del turismo de bajo perfil es su total falta de conciencia, respeto, civilidad y limpieza, por donde pasan dejan montañas de basura, invaden lugares, se estacionan en donde quieren, se alcoholizan hasta la inconciencia, y sólo consumen en súper mercados o tiendas de conveniencia, pues les parece que en Puerto Vallarta todo es caro.
En este sentido, numerosos comerciantes afirman que este tipo de turismo “no compra”, y señalan a los paseantes sin bolsas de compras en las manos, y sí con latas de cerveza, cajas de diversas bebidas alcohólicas, o incluso los “litros para llevar”.
Ciertamente su derrama es contante y sonante en beneficio principalmente los supermercados y tiendas de conveniencia, llegando a casas de familiares o incluso acampando en la playa, sin embargo su conducta y actitud escandalosa y con alto grado de intoxicación etílica, hace que muchos vallartenses se retiren de las playas y se dirijan a sus lugres preferidos como son los ríos locales mientras los visitantes se adueñan de las calles del puerto.
Para la semana de Pascua todo cambia, llega otro tipo de turistas, que según los comerciantes, consumen más, mientras tanto sólo queda aguantar que pase el fin de semana.
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- La policía municipal ha realizado un excelente trabajo.
- En cualquier parte se puede beber alcohol.
- La mayoría de los turistas jóvenes sólo llegan a alcoholizarse.
- Miles de visitantes abarrotan el malecón, “pero no compran”, dicen los comerciantes.
- No obstante la prohibición, los turistas beben en la calle.
- Armados con botellas de alcohol y refresco del supermercado, los turistas hacen su cantina en pleno malecón.
- Ya sean hombres o mujeres, lucen sus cajas de tequila con vasos desechables en plena calle.
- Puros borrachos se ven en las calles en esta temporada.
- Dejan su basura donde sea.
- Los verdaderos beneficiados son quienes venden alcohol.
- Ante la desatada promiscuidad, Setac repartió condones e información
- De la tienda a la playa con las cervezas.
- Se retiran a resurtir tras un día de playa.
- Otros de los beneficiados son los recicladores.
- Unos se van y otros llegan, pero siempre con cerveza en mano.
- Y en el colmo, enormes cantinas en la playa.
- Las playas se encuentran colmadas de jóvenes alcoholizados