By Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas
Algunos restauranteros de Bucerías ven con apatía la próxima temporada turística de Semana Santa y Pascua y no se espera una afluencia extraordinaria a los establecimientos, como en otros años, ya que ahora la forma de hacer turismo es muy diferente porque la oferta cambió mucho el modelo de negocios y de hospedaje.
En otras palabras, afirmó Alberto Quintero, el conocido “Chivero” de Bucerías, que el problema está en que el “todo incluido” o el hospedaje se pagan de manera diferida o a largo plazo o mediano, incluso el sistema de Airbnb también afecta, así como los condominios porque la gente tiene su dormitorio y eventualmente van a los restaurantes que están a la orilla de la playa, pero por la playa, no a consumir.
Por eso, apuntó, “en mi percepción personal esta temporada no la espero tan extraordinaria como en otros años, por lo que hemos insistido, porque la forma de hacer turismo es diferentes donde la oferta cambió mucho el modelo de negocios y de hospedaje, que es el todo incluido, que se paga de manera diferida o a largo plazo o mediano tal vez y la restricción a huéspedes y el sistema de Airbnb también afecta y el tema del condominio”.
De hecho, muchos de los visitantes que se acercan al restaurante, no están pensando en un consumo, porque vienen más limitados en su gasto. Por parte de los empresarios si esperamos gente, pero ya en el tema de negocio la expectativa no es alta, aunque todo depende, para los que estamos en playa, es la estadía, y las cenas en lugares más sofisticados, pero se ve más favorecido el tema de antro.
Afortunadamente en Bucerías ya hay para todos los mercados, pero lamentablemente predomina el consumo de alcohol, lamentablemente. porque eso acarrea otras consecuencias. La región ha crecido mucho en cuanto a su oferta gastronómica y un ejemplo es la Zona Dorada de Bucerías.
Reconoció que esa zona tiene “fuerte crecimiento y es propio aprovechar la oportunidad de mercado y ahí el tema es gourmet y son cenas, o cubren otras necesidades. Lo mismo sucede en el acceso a Nuevo Vallarta, llamada Nuevo Nayarit, que está adquiriendo una vocación atendiendo de la infraestructura de cuartos que tiene, que se puede estimar en miles de habitaciones, y que esa gente es más accesible a salir a tomar la copa o a cenar, más todo lo que hay en la periferia.
Pese a todo Bucerías se busca posicionar en cuanto al tema gastronómico y cada día hay nuevos negocios, nuevas propuestas, y no necesariamente repiten el modelo, sino que son conceptos muy establecidos, como la cocina fusión, tratan de ser diferentes para captar su propio mercado, y los que estamos en playa básicamente compartimos lo que siempre ha existido, y de ahí depende de tu visión de negocios si quieren buscar otro nicho, pero para eso necesitas una propuesta integral de negocio, de instalaciones, de imagen, de cositas pero no deja de ser interesante.
Bucerías, agregó el “Chivero” ahorita ya es un punto internacional obliga a diversificar la oferta, no todo es mariscos y dar calidad, nunca se podrá evitar, la gente que viene al “Todo Incluido”, aunque el turistero batalla con el tema costos, porque se ve obligado por el mayorista que prácticamente les condicionan las tarifas, ellos están peleando con sus costos y demás y el que sufre es el cliente.
Nosotros los restauranteros como hacemos para competir, para poder salir, le apostamos a que se enfade el huésped y no quieran consumir lo que les ofrecen en el hotel y es nuestra área de oportunidad cuál es esa, es calidad, servicio y precio; eso conlleva sacrificar utilidades pero a final de cuentas tratamos de tener ese mercado y atenderlo. Pese a todo Bucerías tiene baja afluencia pero en perspectiva la temporada pasada fue buena, tuvimos excelente ocupación, en su mayoría es gente extranjera y eso, ya repetitiva es interesante porque es lo que le da sostenimiento a un destino turístico, la lealtad del cliente y se ha estado logrando.
