By Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas
Instituciones de educación superior registran un alto porcentaje de deserción de estudiantes a causa de la pandemia, así como a la carencia de equipo tecnológico que les impide asistir a las clases a distancia, y además por la necesidad de trabajar para ayudar a sus familias.
Una de las instituciones de educación superior que ha registrado una drástica caída de la matrícula es el Tecnológico Nacional de México de la Cruz de Huanacaxtle, así como el plantel de Conalep de Puerto Vallarta, aunque no es exagerado afirmar que el problema se presenta en otros planteles de la región.
El director del Plantel Conalep de Puerto Vallarta, el más antiguo en la zona, comentó que “efectivamente en el nivel medio superior estuvimos con actividades académicas a distancia, muchos jóvenes abandonaron sus estudios aun a pesar de los esfuerzos conjugados con padres de familia, maestros, administrativos y directivos”.
Agregó que “sin embargo, pudimos rescatar a muchos de los que ya habían tomado la decisión de dejar sus estudios, gracias a los trabajos encaminados a la permanencia escolar. Puedo comentarle que actualmente contamos con una matrícula arriba de los 900 jóvenes que continuarán estudiando en nuestro plantel Conalep 075 en Puerto Vallarta”.
COMPLICACIONES
El profesor Juan Carlos Galindo Plazola, director de Conalep dijo que lamentablemente en este tiempo de pandemia, al menos en nuestra institución educativa, muchos de los estudiantes no contaban con las herramientas tecnológicas para estudiar desde casa, y algunos de hecho tampoco las habilidades tecnológicas ni los hábitos de estudio para llevar su formación de esa manera.
“Asimismo, al ser una institución con educación tecnológica, también encontramos complicaciones en la parte del desarrollo de las prácticas tecnológicas, tanto en las carrera de alimentos y bebidas como en la de informática. Algunos de estas causas, generaron, que algunos estudiantes tuvieran que desertar de la institución, y algunos más lo hicieron y sigue habiendo deserción, por motivos laborales”.
Y es que debido a la situación económica de las familias los estudiantes tienen que abandonar los estudios para dedicarse a trabajar, para ayudar en el sostenimiento de las familias, y ya no les es posible estudiar y trabajar al mismo tiempo.
El gran reto que aún tenemos es que los jóvenes deben esforzarse para el desarrollo de las competencias que exige el propio modelo académico de Conalep y algunos jóvenes se resisten a esforzarse un poco más, todavía están acostumbrados al mínimo esfuerzo para lograr sus objetivos; aunado a ello otro reto es la puntualidad y la responsabilidad de asistir todos los días a clase.
Juan Carlos Galindo Plazola estimó que la deserción alcanzó un 5% adicional, es decir, año con año, lamentablemente un 5% de los estudiantes que se dan de baja por diferentes situaciones adicionalmente se suma a un 5%, completando un 10% para números redondos.
