José Reyes Burgos
Puerto Vallarta
Pese al notable éxodo de extranjeros en los últimos días, y la baja abismal en la ocupación hotelera, producto de la pandemia de COVID-19 en el mundo; aún quedan en Puerto Vallarta y Riviera Nayarit algunos turistas que han preferido pasar este tiempo de crisis en la costa, y hospedados en condominios, casa y domicilios en renta.
«Honestamente creo que aquí es mejor pasarla, por el clima, porque hay menos gente. Si regreso a Canadá, en los vuelos que quedan, tendría que hacer una escala, antes de llegar a mi ciudad, corro más riesgo de contagiarme allá», comentó una mujer extranjera con su pareja a Vallarta Opina.
En este sentido, aún es posible ver en ciertos establecimientos que permanecen abiertos, especialmente a borde de playa, personas foráneas comiendo y bebiendo, algunas paseando por el Malecón, así como tomando sol en la playa.
Bares, antros, algunos restaurantes, touroperadores de tirolesas, parques ecoturísticos y algunos recorridos en lancha han cerrado momentáneamente. Al menos, hasta a finales de abril.
Por el momento, diversos dueños de negocios llaman a impulsar el consumo local entre los habitantes de Vallarta y pueblitos como Bucerías, y a aprovechar de forma ordenada el poco turismo extranjero que se ha quedado a pasar la crisis sanitaria mundial en esta bahía.