Capacitan a mujeres preliberadas y liberadas que ya son microempresarias

Por Marisela Muñoz/Guadalajara

La Comisaría de Preliberados y Liberados de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social del Estado de Jalisco ofrece capacitación a mujeres con beneficio de libertad microempresarias, en vinculación con INSADE, Interculturalidad Salud y Derechos A.C. y Fundación Coppel.

Para la Dirección General de Prevención y Reinserción Social este tipo de programas es de gran importancia porque fortalecen el objetivo de inhibir la reincidencia delictiva, lo que ha sido comprobado y generado éxito para el sistema penitenciario estatal.

Daniel Serrano, director general de INSADE explicó que el programa “Emprendiendo en Libertad entre Nosotras” está dirigido a mujeres egresadas de situación penitenciaria porque forman parte de una población doblemente vulnerable que debe ser apoyada.

“Nos acercamos a la Dirección General de Prevención y Reinserción Social porque es una institución que nos generó confianza, la investigamos antes de vincularnos y observamos que en Jalisco hay un verdadero compromiso institucional con la reinserción social y con los servicios postpenitenciarios”, indicó el director de INSADE.

“No basta con que la persona egresada del sistema penitenciario se aventure en un micronegocio, que incluso suele ser iniciado en privación de libertad, pues esos negocios debe ser fortalecidos para que no se sumen  a la estadística nacional de vida de este tipo de negocios, de dos años”, agregó.

Explicó que se trata no sólo de micronegocios, sino de negocios sociales, pues las mujeres con algún beneficio de libertad generan redes de apoyo entre ellas, con las que suelen suplir redes familiares con las que ya no cuentan.

A las beneficiarias se les capacita en ventas por redes sociales, protección al medio ambiente, contabilidad y ventas en líneas. Además se les provee de terminales portátiles para venta con tarjeta bancaria.

“Aunque es complicado superar los agravios por la violencia y la delincuencia, es importante que la sociedad deje de ver al sistema penitenciario como fábrica de delincuentes, ahí dentro hay personas inocentes, hay quienes tardan años en recibir una sentencia, hay quienes son producto de condiciones de violencia y marginalidad, hay quienes piden una segunda oportunidad, ¿por qué no dársela?”.