Por Mario Herrera García/Tepic

La emergencia social y de servicios que dejaron las lluvias y el desbordamiento de los ríos que provocó el paso del huracán “Pamela” en los municipios del norte de Nayarit, ya se volvió también una emergencia sanitaria.

Y es que conforme bajan las aguas, el lodo se acrecienta y los artículos arrastrados por la inundación forman montañas de basura y escombros en las calles de los municipios más afectados, entre los cuales están Huajicori, Acaponeta, Tecuala, Ruiz, Tuxpan y Santiago Ixcuintla.

En varios de estos municipios se informó que debido al exceso de humedad que prevalece, los damnificados comienzan a padecer hongos en manos y pies, al igual que infecciones en los ojos.

Además, las carencias y el hambre aumentan entre los miles de damnificados, por lo que la Secretaría de Marina instaló comedores para los pobladores en distintos puntos del estado.

SUBEN EL KILO DE TORTILLAS

Para colmo, el gobierno de Nayarit detectó que el kilo de tortillas pasó de 20 a 45 pesos en el municipio de Rosamorada, ante la inconformidad y quejas de los pobladores.

En respuesta, el gobierno del estado de Nayarit ya entregó costales de maíz en polvo sin costo alguno, a fin de poder preparar ese alimento para la población.

Por ahora, el gobierno de Nayarit no contempla realizar acciones legales contra quienes se atrevieron a subir el kilo de tortilla en medio de la emergencia.

Luego de que el martes la Federación declarara a la entidad zona desastre, también se informó que antes de que Pamela azotara al estado, la administración que encabeza el morenista Miguel Ángel Navarro Quintero pagó un seguro de gastos catastróficos, por el que se recibirán hasta 85 millones de pesos.

El gobernador reconoció que espera que para resarcir las pérdidas agrícolas no se tenga que recurrir al endeudamiento público.

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