By Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas
Bahía de Banderas cuenta con un potencial enorme en materia de ecoturismo y turismo de aventura, cuenta con ríos, cascadas y una gran diversidad en la Sierra de Vallejo.
Además del “Cerro del Mono” está la Cabecera Municipal, Valle de Banderas el pueblo más antiguo y la Sierra de Vallejo, plagados de petroglifos y lugares de leyendas antiguas dignas de los más valientes exploradores, donde solo falta el tesón de un guía conocedor del terreno para llevar turistas aburridos del “sol y playa”.
El jueves pasado se llevó a cabo una reunión en la Secretaría de Turismo del Estado, donde se planteó la necesidad de diversificar los productos turísticos y crear productos diferentes y en los próximos días se reunirán los directores de las áreas municipales de turismo, en Bahía de Banderas, para trazar rutas y tratar de brindar los servicios necesarios a los paseantes que en los hoteles ya están cansados del sol y de la playa.
Jorge Alberto García Orozco, director de Turismo Municipal de Bahía de Banderas, informó que ha estado en contacto con la Directora de Turismo de Aventura, Claudia Medina, quien conoce muy bien la zona y coincide en que el potencial de Bahía de Banderas para generar nuevos productos turísticos es enorme, porque tenemos ríos, tenemos cascadas, tenemos toda esta biodiversidad hacia el Cerro de Vallejo, que nos llevaba a entender por qué Bahía de Banderas es “sui generis”, en este tipo de productos.
Además tenemos la costa y se puede llegar al mar y regresar, escalar y volver a regresar a la zona continental, y todo lo tenemos en Bahía de Banderas, por eso la idea es diversificar. Se considera que el turismo de “Sol y Playa” ya está consolidado en la Riviera Nayarit, pero hay mucho potencial en lo que no se ha trabajado.
Un ejemplo es lo que ocurre en el ejido y población de Higuera Blanca, donde no hay actividad que genere atención a estos nuevos turistas que buscan subir al “Cerro del Monto”.
No hay ni guías, cada quien llega, ‘yo conozco el camino, vente, no hay equipo que los pueda atender, no hay guías confiables, o guías que si algo pasa, sepan que hacer o cómo resolver, no hay quien lleve equipo de primeros auxilios, por eso la intención es activar ese potencial.
PRÓXIMA REUNIÓN
Se prevé una próxima reunión para ver los lugares donde se hace senderismo, porque hay muchos lugares como el Cerro del Mono, otra ruta es entre San Pancho y Sayulita, donde los visitantes caminan entre el mar, la montaña y la selva. Entonces la idea es diversificar la oferta turística, porque el turismo “sol y playa” ya está consolidado y “lo que necesitamos es diversificar, para que toda esta riqueza llegue a la población, y el senderismo se genera fuera de las áreas consolidadas”.
Insistió en el ejemplo de Higuera Blanca y el Cerro del Mono, donde los turistas llegan, se estacionan o se bajan del transporte público de Autotransportes Medina, y a la orilla de la carretera empieza su experiencia. Ahí empieza la ruta, pero lamentablemente “no hay quien les venda una agua fresca”.
Otro ejemplo es la cabecera municipal, el pueblo de más tradición y antigüedad, y en la zona hay rutas, hay petroglifos, hay arroyos, pero tampoco hay prestadores de servicios, no hay guías que hablen inglés, no hay agentes de viajes que ofrezcan o transportistas que lleven al turista.
Lamentablemente no hay ni siquiera un registro de empresas que brinden estos servicios ni su ubicación, porque todas las empresas que tienen raisers, como Rancho Mi Chaparrita, tienen además caballos; también está Rancho Vallejo y según el Director de Turismo “no ha habido más empresas registradas”.
Y argumenta que si hay muchas empresas “marca patito” que surgen pero de manera informal, y lo que se pide es que deben tener y deben estar regulados. Además estas empresas se enfrentan al tema ejidal, con los dueños de la tierra, y la verdad es que los ejidos son viejos.
MOTIVAN A EJIDATARIOS
En este punto refiere que se han hecho diversos trabajos para motivar a los ejidatarios, y un ejemplo de esto es el Ejido de Fortuna de Vallejo, que también cuenta con un gran potencial, similar al del ejido de Cabo Corrientes Las Juntas y Los Veranos que ya cuenta con su propia tirolera y con una amplia gama de servicios turísticos.
En suma, el recurso es basto, y se han visitado los lugares como los petroglifos, las tumbas de tiro, pero falta que los pobladores puedan ofrecer los servicios necesarios de atención al turista. El colmo es que los ejidatarios tienen el vaso de agua, pero se mueren de sed.
