By + Los destinos de un municipio tan importante como Puerto Vallarta requieren de primeros ejecutivos municipales con características muy especiales y que se complementan entre sí
El slogan favorito de la 4T es: “No somos iguales, somos diferentes”, lo escuchamos prácticamente cada día en las mañaneras. Pero la inoportuna realidad, que ha resultado una verdadera pesadilla para los morenistas, nos demuestra a cada momento que los miembros de la 4T en varias partes del país, no son ni una cosa ni otra, sino que en esas regiones la 4T es lo peor que se ha vivido en México.
De tal forma que el barco de la 4T está haciendo agua en varias regiones del país y Veracruz es claro ejemplo del autoritarismo y la imposición.
Los veracruzanos no quieren a la zacatecana Rocío Nahle, existe en la candidata de Morena una fuerte presunción de corrupción, se está demostrando que la austeridad franciscana es de dientes para afuera.
Pero, aunque es importante el entorno nacional y el de las entidades federativas, yo quiero concentrarme en lo que sucede aquí en nuestro querido Puerto Vallarta.
Sí, “México país” fue tachado de surrealista, por Bretón y Dalí, Puerto Vallarta en este 2024 sería el renacimiento de tal surrealismo.
Hay que poner en contexto lo que se interpreta como surrealismo en una persona o grupo de personas. En un lenguaje coloquial “es lo irracional y absurdo de la conducta humana”.
¿Hasta dónde llega la actitud surrealista de la familia gobernante y seguidores en Puerto Vallarta?
Sólo como un acto irracional y absurdo resulta la candidatura de la denominada “Jefa Chuyita”.
Los destinos de un municipio tan importante como Puerto Vallarta requieren de primeros ejecutivos municipales con características muy especiales y que se complementan entre sí; se requiere de una alta capacidad administrativa, complementada con un alto conocimiento en la política gubernamental.
Con mucho respeto, yo considero que no es un currículum que tenga la señora Chuyita.
Y otra muestra de lo surrealista que resulta nuestro municipio, es la migración de miembros del Cabildo actual de Morena al Verde, resultando ahora en una bancada minoritaria la de la 4T, surrealismo puro.
Y qué decir del diputado federal y de su respeto a no mentir, no robar y no traicionar, resultó hasta folclórica la exhibida que le dio su “amigo” y suplente con el adeudo económico, cantado ante los morenistas en el arranque de campaña.
Y pensar que como sociedad civil y clase productiva le pagamos a estos representantes del pueblo, no cabe duda que la marca Morena puede hacer que suceda lo inverosímil.
Incuba diputados que reciben órdenes de no cambiar “ni una coma” a los dictados del soberano, convirtiendo la investidura de un legislador en simples matraqueros o bufones del rey.
Sin duda, será sumamente ilustrativo para nuestra sociedad el resultado electoral del 2 de junio en nuestro municipio, o se impone un voto inteligente, razonado y útil, o como dice la publicidad política de los Morenos… “se van por su voto masivo”.
(*) Jorge Villanueva Hernández, empresario e inversionista en Puerto Vallarta y Bahía de Banderas.
