LA MIRADA INCÓMODA

“Un viajero sabio nunca desprecia su propio país”: Carlos Goldoni, dramaturgo italiano.

Por Alfredo César Dachary – cesaralfredo552@gmail.com

Todos los placeres del ser humano, salvo contadas excepciones, inicialmente han sido privilegios de unos pocos, cuando se popularizan o masifican, dejan de ser el placer de una minoría y pueden transformarse en la fuente riqueza de un grupo exclusivo.

El turismo no fue la excepción, desde sus primeros momentos previos, como el Viaje de Caballeros de los graduados en las grandes universidades inglesas al Grand tour, luego en el siglo XIX los cruceros, eran la vanguardia del lujo, pese al Titánic, pero antes que éste hubo grandes cruceros.

Al iniciar el siglo, el turismo empieza a tomar forma popular con los campamentos juveniles y los viajes de las organizaciones del fascismo italiano, las juventudes nazis y otros grupos políticos de la época en la Europa atlántica.

El Oriente Express fue la expresión del máximo glamour en este tipo de transporte, unía Occidente con Oriente, y con él una larga generación de trenes de lujo ha recorrido Europa y luego Estados Unidos, hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial donde el turismo empieza a masificarse a partir de las nuevas opciones de la sociedad de consumo, dentro del modelo de la American Way of Life.

El turismo que aspiraban las sociedades era ir a otros países, antes solo reservado a los grupos de mayores ingresos, y esto comienza a ser posible por el gran desarrollo de la industria aérea y nuevos modelos de negocios en la transportación, a través de los vuelos chárter, luego vinieron los low cost y al final los cruceros renunciaron a la exclusividad y se masificaron a partir de aumentar su capacidad de pasajeros y, en algunos casos, a tematizar el barco.

EL “NUEVO TURISMO”

Se crea la Organización Mundial de Turismo (OMT) ante un negocio que más de siete décadas no conoció caídas, salvo los cortos períodos de crisis y que hoy sus resultados se ven reflejados en que hay turismo prácticamente en todos los países del mundo, del signo político que sean.

Pero el “nuevo turismo”, que remplaza al anterior o doméstico, es totalmente diferente, es un negocio global operado por grandes empresas que concentran las ventas de los destinos, ya que realizan inversiones en asientos y cuartos anticipadas, lo que les da el dominio de esta actividad, que la definen como un comercio internacional, donde el producto se disfruta en el país de origen.

Los países más desarrollados impusieron el turismo como un nuevo modelo de “colonialismo”, que se opera desde afuera de los países de bajo desarrollo que son receptivos, y se rigen por normas que dictan ellos a partir de los organismos mundiales del turismo, desde la OMT a la IATA, entre muchos más.

Hoy vemos la manipulación de estos centros de poder sobre los países, como son los intentos de alertar o prohibir viajes a México por las autoridades de Estados Unidos y con el conflicto Rusia – Ucrania se verán más afectaciones, como ciertos vuelos suspendidos por falta de autorización de espacios aéreos nacionales, el incremento de los combustibles y otros derivados de una situación excepcional que muestran la vulnerabilidad de la dependencia exterior respecto de los Estados de mercados emisores.

En la mitad de los 90’, estando una misión de Cooperación Española de la OMT, para realizar el primer estudio de las cuentas satélites, que son las que proporcionan una descripción integral de toda la actividad económica en el territorio económico del país, incluyendo actividades que involucran unidades domésticas (es decir, los individuos y las entidades residentes en el país) y unidades externas (los residentes en otros países). Además de ser exhaustivas, las cuentas están completamente integradas y son consistentes internamente.

La cobertura de las cuentas abarca la producción, el consumo, la generación, distribución y redistribución del ingreso, la inversión de capital y el financiamiento.

De este ejercicio salieron datos muy interesantes que anualmente se realizan y en el 2019 sus resultados mantienen las tendencias iniciales.

Consumo turístico según su origen 2019 (Millones de pesos)

1).-El consumo turístico total fue de: 3.547,452 (100%)

2).-Consumo interior: 3.310,789 (93.3%)

3).-Consumo interno: 2,717.885 (82.1%)

4).-Consumo receptivo: 592,904 (17.9%)

5).-Consumo emisor: 236,664 (6.7%)

Desde la primera Cuenta Satélite saltó la pregunta sobre el turismo interior, que es muy importante en los países desarrollados, se sabe poco porque incluso la OMT omite estos datos salvo en el 2016, cuando el turismo internacional era cercano a los 1,500 millones de turistas extranjeros, el interior a nivel mundial fue de 8,000 millones, algo difícil de medir ya que hay una gran mayoría que se mueve en su automóvil, motor home, autobús y otros en avión.

La pregunta que nos queda es ¿por qué no se promueven estos modelos de desarrollo para nuevos emprendedores o empresarios locales que pretendan invertir en turismo?, como la experiencia de los nuevos restaurantes de jóvenes chefs son un ejemplo de éxito en la actualidad.

Hay otros modelos de turismo interior operado por pueblos originarios, como son los Pueblos Mancomunados de Oaxaca, Escudo Jaguar en Chiapas, la mayoría de los denominados pueblos mágicos, que la magia es que sobreviven, sin apoyo fuerte para poder ser competitivos.

EMPRENDEDORES EN VALLARTA

En Puerto Vallarta hay muchos emprendedores que están creando proyectos de ocio, desde zoo a jardín botánico, parques temáticos, del tequila y la raicilla y otros. Sin embargo, el Canopy River, proyecto de un grupo de ejidatarios del ejido El Jorullo, es un programa turístico a la misma altura que Pueblos Mancomunados, pero con una ventaja excepcional, está ubicado en un gran mercado de usuarios extranjeros, la mayoría de Estados Unidos y Canadá y mexicanos, lo cual le garantiza un mayor éxito, a diferencia de otros muy interesantes, pero lejos del turismo masivo.

Canopy River es un ejemplo de tenacidad y de éxito, porque se abren un espacio compitiendo con otras atracciones y lugares típicos del turismo extranjero que han podido también captar, lo cual hace la diferencia tiene turismo nacional e internacional con sus características particulares y es un proyecto nacional, dedicado a mostrar una parte importante de la cultura, el mariachi, el arte de los caballos, en forma individual y en equipo de ambos géneros, encabezadas por las escaramuzas, más otras suertes de la charrería.

La música y el mariachi les da el sello final a la presentación de un día de fiesta mexicana en el ejido, donde no puede faltar la buena comida local, con un tequila para cerrar la noche.

Lo admirable de este grupo es que tuvo que luchar por sobrevivir e imponerse con empresas fuertes, enfrentando el descreimiento de los que clasifican al hombre de campo de una manera simplona y ligera, lo mismo a las mujeres que no solo manejan el caballo, sino la danza mexicana, que es una larga tradición en este Estado “mexicanísimo”.

El paisaje no es tierra sin cultivar es también una forma de ver a los habitantes y su relación con el bosque, los ríos y cerros, por ello son paisajes mexicanos, no se tiene que inventar nada, ya existe y es tan longevo como la cultura.

El poder articular un paisaje rural no tradicional, junto a una ciudad turística y una metrópolis turística, y allí desarrollar en competencia un negocio basado en la cultura mexicana es algo digno de admirar, apoyar y fomentar, como debería hacerse en muchos Estados donde el turismo puede ser una última opción para mucha gente y más para los ejidos que en zonas poco propicias para la agricultura se han transformado en el escenario ideal de un turismo de aventura y deportes en la naturaleza que ya está impuesto en este destino.

El turismo de la periferia no es algo marginal u ocasional es la región que vive de un destino turístico y como tal atrae a sus jóvenes, que ahora tienen una oportunidad en la región de desarrollar un proyecto que fue iniciado por un grupo con mucho valor y hoy representa una marca más allá de lo regional, pero que a diferencia de otras tiene a sus hijos, hijas o nietos como el futuro de ésta, un modelo de negocio que así garantiza, continuidad y calidad en ascenso.

El turismo interior en los países desarrollados crece y con ellos la identidad expresada en la gastronomía típica y las actividades que se transforman en atractivo, en este caso Canopy River, es un modelo de turismo que promueve y enaltece lo nacional, sin dañar a otras imágenes, pero como local es el encargado de hacer sentir el valor de una cultura y un mundo donde la globalización homogeniza a la gran periferia, mientras integra a un mundo del ocio donde reina su idea cultural y el modelo social que ésta representa.

La falta de estudios sobre el turismo interior, no es un olvido, es un modelo de ocultamiento selectivo a un sistema alternativo que genera una mayor dinámica económica hacia dentro del país.

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