Embarcaciones turísticas locales, un sector subestimado

EDITORIAL

En años recientes pocas veces se ha hablado de la importancia que tiene el sector de las embarcaciones turísticas locales que realizan recorridos por la bahía de Banderas, con salidas diarias tanto en Puerto Vallarta como en Riviera Nayarit.

Y es que, sin lugar a dudas, se trata de uno de los grandes atractivos turísticos con los que cuenta esta región del occidente del país, con servicios y precios para todos los bolsillos.

En este contexto, recordamos que hace más de 10 años la entonces Administración Portuaria Integral (API) implementó una exitosa campaña para promover al sector de los cruceros turísticos locales, que se han caracterizado por resistir las buenas y las malas temporadas vacacionales.

Aquella campaña se llamó “Vallarta desde el mar” y proponía a los miles de turistas que llegaban a esta región conocer los atractivos del puerto a bordo de una embarcación. Sin duda fue un programa turístico exitoso, aunque faltó mantenerlo durante muchos años más.

Ahora, por fortuna para el sector, en términos generales el 2023 resultó ser un buen año en recorridos por la bahía y afluente de vacacionistas, no obstante que para muchos empresarios y compañías del ramo las ganancias nos son lo que desean.

Aun así, en los albores de este año se reporta la gran demanda que tienen tanto en el mercado doméstico como el extranjero, de tal forma que en 2023 se registró un ligero incremento tanto en recorridos como en turistas transportados.

La información proporcionada por la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) Puerto Vallarta, detalla que se totalizaron 37 mil 105 recorridos durante el año pasado, lo que representó un incremento del 1.4 por ciento respecto al 2022, cuando fueron 36 mil 582 recorridos en barco por la bahía de Banderas.

En cuanto a los pasajeros que disfrutaron de estos recorridos el incremento fue aún mayor, ya que fueron 620 mil 627 turistas transportados, es decir, 1.8 por ciento más que en 2022 cuando fueron 609 mil 909 pasajeros quienes conocieron Vallarta desde el mar.

Como se ve, el sector de las embarcaciones locales hace una importante aportación a la industria turística regional, al contribuir con la generación de empleos y la derrama económica que se capta a lo largo de todo el año.

Es, sin duda, un sector que opera en beneficio del destino turístico al ser las embarcaciones locales, desde hace décadas, muy atractivas para el visitante por los recorridos que ofrecen por la bahía de Banderas.

Pero no es solo eso, sino que además las empresas integrantes del sector realizan visitas a diferentes playas de la bahía, permeando esa derrama económica en otros municipios como Cabo Corrientes, cuyas playas se ubican entre las más atractivas del occidente del país.

Según datos de la Asipona Puerto Vallarta, las rutas y playas de mayor demanda son los arcos de Mismaloya, Las Ánimas y Quimixto, así como Yelapa, las islas Marietas y Caletas.

Se dice que, en cada jornada, en los mejores periodos salen al mar cerca de 40 embarcaciones y también crece la demanda por el deseo de observar a las ballenas jorobadas que por estas fechas ofrecen el mayor espectáculo en aguas de la bahía de Banderas.

Es por estas y otras razones más que no se puede entender que un sector tan importante para la industria turística de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas no figure en las decisiones que se toman en materia de promoción, publicidad y relaciones públicas. Y es que definitivamente el sector no figura, al menos, como tendría que ser tratándose de una prestación de servicios que aporta mucho en turismo.

Es por ello que crece la necesidad de revalorar al sector para integrarlo a las acciones de promoción, no solo por lo que representa, sino por todo lo que puede aportar a la industria, que por estas fechas atraviesa por una muy buena racha que nos beneficia a todos.

Por ello no es aventurado decir que las embarcaciones turísticas locales pertenecen a un sector que ha sido subestimado por las respectivas autoridades de Turismo en los últimos años.