By Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas
Empleados y administradores de condominios, así como de hoteles de Riviera Nayarit y Puerto Vallarta, reciben capacitación para estar preparados ante la temporada de huracanes y saber qué hacer ante un fenómeno como este, así como en casos de sismo e incluso de tsunami.
La capacitación es impartida por el instructor Andrus González, de Consultores & Asociados, es quien da los elementos necesarios para aprender a tomar medidas de seguridad para temporadas de huracanes y los asistentes son representantes de la Asociación de Propietarios de Condominios y Asociación de Hoteles de Puerto Vallarta y Riviera Nayarit e incluso el DIF de Bahía de Banderas.
El objetivo es que el sector privado esté preparado no solo ante un huracán, sino ante cualquier eventualidad; en esta plática se les da los elementos necesarios porque ellos tienen dudas en cuanto a que si está bien lo que hacen, desde el momento en que PC emite la primera señal de que se está formando un huracán hasta el momento en que éste se presenta.
Todo el sector privado y la sociedad en general, realiza ciertas acciones previas y se prepara ante el fenómeno, pero no están seguros si está bien lo que hacen y por eso se han enfocado a dar una serie de pasos a seguir para corregir sus métodos, porque es uno de los objetivos de la capacitación que la hotelería y condominios y toda clase de instalaciones donde hay concentración de personas, y que el sector privado en general pueda montar un refugio temporal.
Ese refugio tiene que ser autosuficiente, y si no pueden hacer un refugio temporal, que al menos puedan hacer un análisis de riesgo en su inmueble y saber qué área es la de menor riesgo y que huéspedes y habitantes puedan estar seguros en caso de un huracán.
Pero sobre todo, indicó Andrus González, lo importante es que ellos tengan una visión más amplia, porque hay que recordar que la prevención es un proceso cíclico donde ellos tienen que ser observadores de los riesgos potenciales que puedan tener, no solo en su propiedad sino también afuera.
Deben observar si hay cables eléctricos cercanos, si hay un tanque de gas del vecino o el propio que riesgo puede llevar. En el caso de los habitantes de Puerto Vallarta, muchas veces confían en que un huracán no va a entrar, pero realmente lo que afectan no son los vientos, lo que afectan realmente son los escurrimientos pluviales son los que implican mayor riesgo, en toda la región de Bahía de Banderas.
El objetivo es que los asistentes puedan organizar un comité interno, independientemente de las brigadas de seguridad del municipio. Ellos deben prever su propia logística, su áreas de suministros, deben levantar censos, que vean la importancia de estar preparados en la fase de operatividad y preventiva.
Se debe considerar incluso la gente que hay en los alrededores, porque aunque en la zona las personas estén acostumbradas a los huracanes, la realidad es que no está organizada y además muchas personas vienen de otra parte a trabajar aquí, y ellos ya tienen una visión diferente.
Por ello que se requiere es impulsar al personal para que ellos puedan, porque por ejemplo hay hoteles que están en la zona de Conchas Chinas, que en caso de una precipitación fuerte, registran escurrimientos que bloquean la carretera y se dificulta encontrar como llegar a un área segura,
En las reuniones de capacitación ellos mismos platican y quieren saber si lo que preparan es lo correcto. El instructor destacó que en esta ocasión hay muy buena respuesta del sector privado hotelero, condominios, pequeños comercios, centros comerciales, tiendas departamentales, e incluso las escuelas públicas y privadas, buscan la manera de replicar la capacitación de prevención.
Resaltó que incluso las familias tienen que estar preparadas ante este tipo de emergencias, no se diga los centros de educación básica y media superior, cuyas autoridades deben planificar y prepararse ante un huracán. El sector de educación media superior, deben poder formar parte y tener conocimientos de como poder tomar medidas preventivas.
