Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas

El obispo de la Diócesis de Tepic, Luis Artemio Flores Calzada, convocó a los fieles de todas las parroquias que le corresponde, tanto de Nayarit como de Jalisco, a aportar los artículos más necesarios para las familias damnificadas del norte de Nayarit que prácticamente lo perdieron todo.

La convocatoria firmada por Don Luis Artemio Flores Calzada, VIII Obispo Diócesis de Tepic y Presbítero licenciado Fausto Ramos García, secretario canciller, fue enviada a los párrocos de todo el territorio, asignando los artículos o productos que pueden aportar, y aclara que en cuanto a la alimentación, ya se encuentra resuelta por los comedores alimentarios que instalaron los ayuntamientos, en coordinación con el gobierno estatal.

La convocatoria dice textualmente: “Diócesis de Tepic, como es de su conocimiento el pasado 23 de octubre el huracán Roslyn causó muchas afectaciones en varias comunidades de nuestra amada diócesis, principalmente en la zona Costa de Oro el vicario Diocesano de Pastoral, el Vicario Episcopal de esa zona  y el asesor diocesano de Cáritas, se reunieron con los párrocos y cuasi párrocos de las comunidades que resultaron con mayores daños. Juntos estarán dando seguimiento a las familias de las localidades más vulnerables que perdieron techos, paredes e incluso sus casas completamente para encontrar las formas de ayudarlas con el apoyo de Cáritas Mexicana y de otras instituciones”.

Aclara que “en general por el momento la necesidad alimentaria está cubierta por los comedores comunitarios que los ayuntamientos y el gobierno estatal han brindado, pero quiero reconocer y también agradecer a catequistas, fieles y sacerdotes de distintas parroquias que solidaria y fraternalmente se han hecho presentes compartiendo alimentos y ayudando desde sus posibilidades. Con todo ello los párrocos de estas comunidades han externado la necesidad de ciertos artículos que nuestros hermanos damnificados requieren con prontitud. Por lo que he tomado la decisión de que los apoyemos entre toda la diócesis solicitando en las parroquias dicha ayuda y organizados por zonas pastorales”.

MÁS APORTACIONES

A la zona centro le corresponde aportar todo lo que se refiere a loza, platos, vasos cubiertos; a la Zona Sur se le piden artículos de higiene personal, desodorantes, rastrillos, toallas sanitarias, shampoo, Jabón y papel higiénico. A la Zona Costa Alegre, se le solicita  ropa de cama y colchonetas, sábanas y cobijas y  a la zona Jalisco, artículos de limpieza para el hogar. Finalmente a la zona Costa de Oro, se le pide agua embotellada, aunque solo a aquellas parroquias que no hayan resultado afectadas.

Es preciso señalar que en el caso de la Isla de Mexcaltitán, por ejemplo, la mayoría de los habitantes perdieron los techos de sus casas, que les arrancó el fuerte viento, quedando las paredes desnudas. En otros casos es importante reforzar las paredes, para evitar que se caigan en el futuro, y en otros casos las casas se inundaron con agua lodosa que echó a perder sus enseres domésticos, desde productos alimenticios, hasta jabones o ropa personal y de dormir.

Los sacerdotes de los templos de Bahía de Banderas y Puerto Vallarta, exhortaron a los fieles durante las misas, en sus diferentes horarios de este domingo, para acudir con generosidad en apoyo de las familias afectadas de los municipios de Acaponeta, Santiago Ixcuintla, Tecuala, tuxpan y San Blas, en donde más de 30 comunidades sufrieron el embate del huracán Roslyn.

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