By Por Rafael Delgado Gutiérrez/Tepic
La diputada de la XXXIII Legislatura, Laura Inés Rangel Huerta, acudió a las oficinas de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (CEDDH), en donde presentó una queja en contra del Sistema Integral de Agua Potable y Alcantarillado de Tepic.
Esto fue por atentar contra la salud pública de las familias mediante el corte del servicio de agua y el drenaje sanitario, denunció en entrevista.
Luego, un poco más tarde, el diputado Luis Enrique Miramontes Vázquez hizo lo propio ante este organismo de Derechos Humanos.
Aseguró que no permitirían la acción criminal del SIAPA de suspender el servicio de drenaje sanitario por ser un tema de salud pública.
Antes, Rangel Huerta hizo notar que el tema no es la limitación del servicio de agua potable que, pese a ello, tienen que dotarles de 50 litros por habitante de cada vivienda.
“Ese no es el tema real. El tema real del que estamos hablando es el del drenaje y lo vuelvo a decir, independientemente de cómo lo platicaba en este momento, están haciendo un daño a la colonia, la 2 de Agosto, que ustedes ya conocen, que la acababan de arreglar, que estaban tan bonitas sus calles y hoy con pico y pala están abriendo por todos lados”, dijo.
Lo lamentable, señaló, “es que no van a arreglar las banquetas y pavimento que abran, tal como ha sido una de las historias que se han vivido cuántas veces”.
Ahora, aseguró la legisladora, clausurar las descargas de drenaje sanitario es una afectación a la salud pública, no solamente en el entorno de la vivienda, sino también al momento en que el trabajador quite el tapón que obstruye las aguas residuales, podría causarle un daño a su organismo por la concentración de los fétidos olores y por eso va a “sonreír”.
