Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas

La plaza principal del pueblo de pescadores La Cruz de Huanacaxtle, es sin duda una de las más bonitas, donde es grato caminar en los andadores y banquetas bajo la sombra de los enormes huanacaxtles que adornan el espacio y que dan nombre al pueblo.

Sin embargo desde hace varios meses la plaza estaba sola y prácticamente abandonada, debido a que la oscuridad que reinaba en sus espacios, luego de que se habían fundido las luminarias.

El fin de semana el regidor del XI Ayuntamiento acudió por la tarde y se percató de esta problemática, y pudo ver que solo una persona estaba en uno de los pilares del kiosco, pero pasaba desapercibida por lo oscuro del espacio.

Este lunes, el regidor localizó a encargado de dar mantenimiento a la plaza a quien le preguntó porque no había luz en las tardes, y éste le respondió que las 9 o 10 luminarias se encontraban fundidas y no se habían cambiado.

Inmediatamente, el profesor José Antonio Plácito preguntó cuánto costaba adquirir las 10 luminarias y se resolvió el problema, para que los habitantes de la Cruz de Huanacaxtle puedan disfrutar su plaza pública.

El regidor afirmó que para lograr esto, solo es necesario tener voluntad y espíritu de servicio “para buscar la mejor solución de nuestros pueblos”.

En la plaza pública de La Cruz de Huanacaxtle, se ve la diferencia y son cosas sencillas pero que valen mucho y solo es cuestión de invertir y cambiar unos focos para que esto cambie.

Hoy la plaza pública de la Cruz de Huanacaxtle ya no da miedo y luce tan digna como las instalaciones debidamente iluminadas de la Marina la Cruz, que es lugar de esparcimiento para habitantes locales y para turistas de diferentes partes del país y del mundo.

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