By Por Rodrigo López Becerril/Puerto Vallarta
Una tarde caótica fue la que vivió una gran cantidad de personas este viernes, debido a la manifestación de un grupo de trabajadores sindicalizados al servicio del Ayuntamiento local, en demanda de una serie de peticiones, lo que trastocó la rutina de miles de personas, tanto locales como turistas y causó además una pésima imagen del puerto como destino turístico.
En opinión de dirigentes de sectores clave de la actividad productiva en el puerto, esta manifestación atenta directamente contra Puerto Vallarta, al mostrarlo como una urbe caótica, con poco respeto para los visitantes, muchos de ellos personas que perdieron un tour o un vuelo en su trayecto al aeropuerto, y que se fueron con una pésima imagen del destino e incluso del país.
El presidente del centro empresarial Coparmex Vallarta, Juan Pablo Hernández, rechazó este tipo de actitudes por parte de los trabajadores municipales, al señalar que incluso si todas las peticiones fueran justas y válidas, en el marco de la ley, no hay necesidad de afectar la vida de miles de personas para hacerse notar, cuando se puede y debe utilizar la capacidad de diálogo y el poder de la negociación.
Destacó que las autoridades municipales han estado en plena disposición de dialogar, de negociar desde un inicio, ya que se respondió a la petición original respecto al bono decembrino para los trabajadores de Bomberos y Protección Civil, por lo que no se debía estrangular las vialidades de la ciudad como una medida de presión no para las autoridades, sino de afectación a todos los que aquí vivimos y nuestros visitantes.
Con él coincidió el presidente de la Cámara Restaurantera, Sergio Jaime Santos quien hizo un llamado a detener este tipo de actitudes, a no escalar las medidas de presión porque el más afectado es el sector productivo, la gente que tiene que desplazarse y trabajar, y los visitantes que quieren olvidarse de la vida en la gran ciudad y disfrutar de una playa tranquila.
Aunado a estas opiniones de dirigentes de los sectores empresarial y restaurantero, en las redes sociales algunas de las peticiones de los líderes sindicales fueron calificadas como exageradas e incluso abusivas, fueron señaladas como privilegios por muchos usuarios.
Por ejemplo, el secretario general del Sindicato de Servidores Públicos al Servicio del Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Gilberto Lorenzo Rodríguez, de quien se dice gana 150 mil pesos mensuales (ya sin cargo público, es decir por no hacer nada) pide un bono de 50 mil pesos para “gastos personales”, el uso de tres vehículos en comodato y el pago de vales de gasolina.
Una situación similar es la de Cecilia V, líder sindical del DIF Puerto Vallarta, quien pide una licencia vitalicia de 36 mil pesos al mes.
