José Reyes Burgos
Puerto Vallarta

Crucero con un total de 77 personas con síntomas “similares a la influenza” pero no diagnsoticados tiene como plan b atracar en la terminal maritima vallartense.

Fotografía: La Prensa / El Zaandam en un puerto de Sudamérica.


Ha trascendido en la prensa nacional e internacional que uno de los cruceros con pasajeros que se encuentran navegando en altamar sin rumbo, es el Zaandam, de Holland American Line. Lo habitan a bordo mil 243 pasajeros y 586 tripulantes, para un total de mil 829 personas en su interior. Y justo ahora, de acuerdo a un comunicado de la propia naviera, al menos 77 personas presentan síntomas similares a los de la influenza.

La situación a bordo, es que a los 30 pasajeros y 47 tripulantes enfermos, no se les puede diagnosticar correctamente, pues el barco no tiene pruebas de COVID-19 a bordo, por lo que no se tiene certidumbre de si se trata de un brote o no de la pandemia al interior del barco; pero, por ahora, todos han sido aislados en sus camarotes.

La embarcación salió de un viaje el pasado 7 de marzo desde Buenos Aires, Argentina; su destino final era San Antonio, Chile, para el 21 de este mes; pero el cierre de fronteras en ese último país sudamericano se impuso antes de la fecha de arribo, y únicamente pudieron desembarcar a dos ciudadanos chilenos y cinco franceses con enfermedades crónicas que sin atención en tierra, podrían provocarles la muerte.

Por ahora, se sabe que el Zaandam tiene cinco ciudadanos mexicanos a bordo; y su primera opción de atraque, es el puerto de Fort Lurdeldale, en Florida; sin embargo, Estados Unidos tiene cerradas sus fronteras a las operaciones navieras turísticas y en caso de que al crucero no se le permita arribar, el plan b del capitán es llegar a Puerto Vallarta.

El Gobierno de Panamá ha informado que al crucero no se le permitiría desembarcar pasajeros en suelo nacional, cuando este llegue, sino únicamente pasar a través del canal. Perú también le ha negado la entrada. Su única opción sigue siendo pasar a través del territorio panameño y continuar hacia EE.UU.

Hace unos 10 días, su similar, el Rotterdam, arribó con todos sus pasajeros a Puerto Vallarta, como estaba programado, y en medio de la crisis estalló el cierre de las operaciones de cruceros en Estados Unidos, así que la tripulación decidió repatriar a sus pasajeros  vía aérea y además el barco se quedó para reabastecerse y ajustar detalles técnicos algunos días más en Puerto Vallarta.

Ahora, el Rotterdam ha partido hacia el encuentro del Zaandam para ayudarlo con el surtido de provisiones, porque lleva más de 15 días en altamar, material médico y pruebas de COVID-19.

A Vallarta también llegó el MS Europa de Hapag Lloyd; arribó con menos de 300 pasajeros alemanes, que de igual manera fueron auxiliados para abrir un puente aéreo que los regresara al viejo continente utilizando el Aeropuerto Internacional.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes de México, por tanto, mantiene un puente humanitario abierto para cruceros en emergencia en Vallarta, tomando medidas sanitarias correctas, según lo ha establecido, como evitar el contacto de los pasajeros con la población local, su rápido traslado y esencialmente, a revisión y diagnóstico de los pasajeros para determinar si tienen o no COVID-19.

Por ahora, el Zaandam mantiene el rumbo al Canal de Panamá, donde esperará la respuesta del gobierno de los Estados Unidos para conocer si puede o no llegar a desembarcar a Florida. Si la respuesta es negativa, Puerto Vallarta será su destino.

Este último dato ha trascendido a raíz de los testimonios de los mexicanos que están a bordo, quienes han escuchado al capitán decir que el paradero final del barco será el destino turístico en la costa de Jalisco si no pueden llegar a suelo estadunidense. Por ahora, cabe señalar que la Administración Portuaria Integral no ha informado si recibió o no una solicitud formal por parte del Zaandam para llegar a la terminal.

 

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