Tortugas “turistas” regresan a la bahía de Banderas durante esta época del año

Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas

Desde hace tres años el Grupo de Investigación de los Mamíferos Marinos GRIMMA inició un proyecto para el seguimiento de la migración de las tortugas carey.

Con esa finalidad se colocaron “chips” en un grupo de hembras y machos de tortugas, para estudiar su desplazamiento en el mar y para que fuese más “familiar su localización” se les asignaron nombres.

Por ello nos toca hablar de Sofía, Zoe, Heidy y Lucía, quienes partieron desde Bahía de Banderas a donde acudieron a desovar para dar continuidad a su especie y luego seguir su periplo por el océano.

Es importante señalar que la tortuga carey es propia del Atlántico y en el Pacífico la variedad es la golfina, por eso extraña la presencia de carey en el Pacífico, cuya población cada día es más importante.

Resulta asombroso conocer dónde han estado, estas tortugas que son unas “expertas turistas” en la mar y que sin poder señalarlas de “mochileras” si nos refieren por rastreo denominado telemetría satelital donde han estado.

Aunque la mayoría sale y retorna a Punta de Mita, sitio que se está corroborando como un punto de anidación importante, las distancias que recorren llegan a superar los 200 kilómetros.

CHIPS EN EL CAPARAZÓN

La doctora Catherine Hart narró en reciente conferencia ofrecida vía zoom, a investigadores de mamíferos marinos como si se tratase de un cuento compartido entre la academia y todos los interesados en la materia, incluye a los medios de comunicación sobre la forma en que estos mamíferos marinos son seguidos y se reporta un avance importante en la investigación,

Según relató la doctora Hart en su conferencia, hasta el momento se han incorporado al proyecto 18 tortugas hembras y nueve machos; a las dos primeras a las que se les colocó el transmisor satelital, se les denominó simplemente tortuga “A” y tortuga “B”, y a algunas otras se les ha dado nombre de mujer. La última a la que se le colocó el “chip” satelital en su concha, que es de un material similar al de una uña humana, fue el pasado domingo.

Lo interesante de estas tortugas es que no todas toman el mismo camino, en el caso de las primeras mencionadas a las que se les ha dado seguimiento desde 2019, que se localizaron en playas de Punta Mita, al salir al océano una enfiló hasta las islas Marías, en tanto que otra se fue hacia Mazatlán, y otra más se fue a San Blas e incluso otra solo llegó a Chacala.

Las que se siguieron durante 2020 y 2021, unas se fueron hacia el sur hacia Yelapa y Chimo y otra alcanzó las playas de Tahuamixtle, cerca del campamento tortuguero de Mayto, donde al parecer hay un sitio de alimentación tortuguero.

ZONA DE ANIDACIÓN

Lo que al paso del tiempo se confirma es que bahía de Banderas y específicamente Punta de Mita se identifica como área de anidación.

Según dijo la doctora Hart, los machos también son importantes, este 2021 ha sido un excelente año para las investigaciones de tortugas carey, este año se dio el caso de liberación de una tortuga macho, que se llama Bill, que fue entregado por pescadores de Tehuamixtle, en Cabo Corrientes, en el campamento tortuguero Mayto, y se le puso el transmisor satelital.

La diferencia entre hembra y macho de las tortugas carey, es que la hembra tiene una cola pequeña y el macho tiene una cola más grande.

En el caso de Bill se registró una última  transmisión el 23 de julio, salió del campamento tortuguero, hizo su migración, pero no se sabe hacia dónde se fue.

Se ha dado seguimiento a otro macho de nombre Tito, localizado en las islas Marías, en las Cleofas, que sigue transmitiendo de esa isla, lo que hace pensar si los machos son más estables en una determinada zona.

También se han instalado “chips” a tortugas jóvenes, pero tampoco salen fuera de su zona y lo que se ha establecido son las áreas de alimentación como las islas San José, el archipiélago Espíritu Santo, y Cabo Pulmo, en Baja California Sur, y en la costa de Jalisco, Mayto y Tehuamixtle son importantes como área de alimentación de las tortugas carey.

TORTUGAS EN LA BAHÍA

Ahora se sabe que hay muchas tortugas carey en la bahía de Banderas y se confirma este dato gracias a buzos y turistas que toman fotos de individuos de esta especie.

Se ha establecido un procedimiento de información mediante la fotoidentificación, como en las ballenas y el jaguar; este tipo de marcaje no se persigue al animal, sino que el objetivo del estudio, es trabajando con la seguridad, se emite un catálogo de carey, se trabaja con un programa de aprendizaje automático, para poder automáticamente identificar las tortugas carey.

Según dijo la doctora Catherine Hart, en total se han detectado 528 tortugas carey en todo el Pacífico oriental, se identifica 110 individuos en la zona de la bahía de Banderas y Jalisco.

Es importante señalar que esta especie de tortuga no se persigue para obtener carne porque no sirve de comida, debido a que su alimentación de esponjas convierte su carne en tóxica. La tortuga carey solo es perseguida por el material de su caparazón, que se usa para artesanías, pues con ella se elaboran bolsas, peines y si se le aplica calor es muy maleable. En Campeche se trataba ese material por los artesanos locales.