Un vistazo al turismo en 2023 y las perspectivas para el 2024

OPINIÓN

Por Marc Murphy

¡Hola todos!

En el espejo de la memoria, el año 2023 se desvaneció, dejando tras de sí un rastro de experiencias, desafíos y triunfos en el vasto universo del turismo; por lo tanto, es el momento propicio para reflexionar sobre lo que fue y anticipar lo que será.

Antes de entrar en materia, quiero agradecer el apoyo brindado a este espacio, donde he tenido el privilegio de compartir mis reflexiones sobre temas fundamentales de la industria turística. Extiendo mi gratitud al Grupo Editorial Vallarta Opina por darme la oportunidad de publicar mis escritos en esta plataforma, permitiéndome contribuir al diálogo y análisis de las tendencias actuales en el turismo.

En 2023 hemos presenciado la resiliencia de la industria, su capacidad de adaptación a circunstancias cambiantes y su compromiso con la innovación. El año que concluye nos regaló el regreso gradual de la normalidad en los viajes, marcando un hito en la recuperación postpandemia. Experimentamos el renacer de destinos turísticos, el auge de nuevas formas de explorar el mundo y el florecimiento de la conciencia sostenible, un factor determinante en la elección de experiencias, establecimientos hoteleros, medios de transporte y otros aspectos.

En México, el turismo sostenible ha trascendido de ser una moda pasajera para convertirse en una exigencia ineludible, especialmente para la industria hotelera. Esta última ha integrado de manera consciente prácticas que reconocen al turismo como un medio para la preservación tanto cultural como medioambiental, redefiniendo así su cadena de valor.

En ese sentido, el 2024 se presenta ante nosotros como un lienzo en blanco de 12 meses que, sin duda, nos plantearán desafíos significativos, pero también nos brindarán vastas oportunidades de crecimiento y transformación. En este año que se avecina, vislumbramos una continuación del resurgimiento postpandemia, pero con un matiz distintivo, en el que la personalización de las experiencias y la sostenibilidad se entrelazarán más estrechamente. Los destinos que abracen la preservación de su rica herencia cultural y medioambiental serán los protagonistas, cautivando a viajeros que buscan más que simples destinos; buscan conexiones significativas con el mundo que exploran.

Así mismo, el turismo será testigo de una mayor conciencia, en el que la resiliencia, la creatividad, la innovación y las tecnologías disruptivas serán los motores que guíen a esta industria en constante evolución.

En lo personal estoy emocionado por lo que nos depara el futuro en la industria turística, tanto en México como a nivel internacional. Y aunque en un primer momento se prevé un panorama nacional complicado, tengo plena confianza en que el sector seguirá en bonanza y aportando todos los beneficios que supone a nuestro país y a la población que ocupa y beneficia.

Sigamos, pues, siendo exploradores intrépidos, aprendiendo de nuestro pasado, disfrutando del presente y anticipando con emoción el fascinante horizonte que nos espera en el 2024.

¿Qué piensan ustedes? Envíenme sus comentarios.