José Reyes Burgos
Puerto Vallarta
En la foto: filtro voluntario para pasajeros que abordan vuelos en el Aeropuerto de Vallarta.
Ningú contagio, afortunadamente en Puerto Vallarta, del nuevo coronavirus que causa la pandemia global. Sin embargo, la que enferma es la economía local, pues la baja de turismo es casi total, esencialmente la de extranjeros quienes ya tenían sus reservaciones hechas y las cancelaron de último momento, dejando a hoteles con las manos vacías.
A esto, se suma la instrucción del Gobierno de Jalisco en, sin un decreto del gobierno federal para una cuarentena total y antes de lo previsto, ordenar el cierre de bares y lugares de entretenimiento, así como reducción en un 75% de la capacidad en restaurantes y 50% para cines, dejando al propio local y al turista nacional sin opciones para esparcirse.
Si el turismo nacional viene, lo hará con cierto temor y poco podrá hacer para divertirse en Semana Santa y Pascua, que estaban previstas como un respiro a la economía turística del puerto. Quienes mas sufren, ya son los empleados de hoteles, siendo enviados a «descansos forzados» sin garantías de sueldo.
Incluso, algunos hoteles consideran la posibilidad de cerrar totalmente hasta que el evento emergente termine. De acuerdo a la Secretaría de Salud, esto podría ocurrir al cumplirse las 12 semanas del primer caso, es decir 3 meses, iniciando mayo.
Peor aún, en uno de los mapas de reporte de casos en Google Maps, aparece un marcador de caso confirmado de COVID-19 sobre Puerto Vallarta, lo que podría asustar a muchas personas que aún piensen venir, perjudicando la imagen del destino. La realidad es que no hay casos aquí de momento, e incluso, circula el dato de que ayer la prueba realizada a un paciente con sintomatologia que llegó de Tomatlán y fue trasladado a un hospital particular, resultó afortunadamente negativa.
Entre tanto, hoteleros y empresarios locales ya trabajan en un plan de emergencia para mermar un poco sus pérdidas económicas y promover a Puerto Vallarta en cuanto pase la contingencia, y así lograr que el turismo regrese lo más pronto posible. Por ahora, sin cruceros llegando, con vuelos vacíos o cancelando (el caso de WestJet), y el turismo nacional entre la espada y la pared, este destino recuerda los tiempos del 2009 y 2010, cuando muchos quebraron por la falta de clientes.
Recordemos que el total de casos del nuevo coronavirus en México es de 93 hasta el día de ayer, con 7 de estos en Jalisco. Pero la Secretaría de Salud ha advertido que los contagios irán incrementándose; según la UNAM, el verdadero brote surgirá entre el 20 y 30 de marzo, cuando ya no se trate de casos importados, sino de contagios locales. Podrían ser miles o decenas de miles.