+ En 2018 la sociedad patentizó su hartazgo ante los partidos políticos

PLANTILLA 5 - El proceso electoral del 2024 será histórico

El proceso electoral del 2024 será un proceso nunca visto en nuestro país, el 2018 fue un año en que la sociedad manifestó su hartazgo ante los partidos que habían marcado la alternancia política en nuestro país.

La evidencia es clara de que PAN y PRI cuando ocuparon el gobierno federal, no satisficieron a la sociedad nacional, fundamentalmente, por los altos índices de corrupción, con una política pública de cuates, familiares y grandes empresarios. Esto marcó el rumbo para que la sociedad volteara a la “izquierda”.

Una sociedad abatida por  la desesperanza de un buen gobierno capaz de abatir la brecha de desigualdad social y, sobre todo, sacar a la gran multitud de gente en pobreza extrema, y pobreza en general le dieran la confianza a un movimiento que encabezó López Obrador con las premisas “primero los pobres” y “Morena la esperanza de México”.

Y de esta manera poco más de 30 millones se abrazaron a las esperanzadoras palabras de un líder carismático que supo darle lectura exacta al momento histórico que vivía el país.

De aquel discurso del triunfo y el de la toma de posesión sólo quedan palabras que resultaron en poco tiempo en el olvido.

Poco a poco se fue mostrando el verdadero personaje que hoy ocupa Palacio Nacional, y poco a poco fueron resurgiendo las palabras ya mencionadas con anterioridad, como “al diablo las instituciones”.

Y surgieron nuevas frases como “no me salgan con que la ley es la ley”.

La nación comenzó a vivencial la autoridad de un solo hombre, nunca antes un presidente había acumulado tanto poder.

La voz desde el púlpito nacional lanzó una nueva manera de hacer política pública, donde el requisito de funcionarios federales obligaba un 90% de lealtad y un 10% de conocimiento.

Las malas y pésimas decisiones en el país no importaban, lo importante era una lealtad cortesana a su majestad.

Independientemente de la acostumbrada cantaleta de “yo traigo otros datos” la realidad se fue imponiendo en la vida nacional dándole verdadero peso y realidad a los alcances de la 4ta transformación.

El saldo es negativo ya que Andrés Manuel López Obrador se ha dedicado a descarrilar programas que el 2018 ya eran una política de Estado en nuestro país. Políticas públicas que a pesar de sus fallas permitían atender condiciones estructurales de pobreza, desigualdad y marginación.

Estamos a menos de un año del proceso electoral del 2024, cada vez se suman más voces que concluyen que el país va en picada, es tiempo de reflexionar que queremos como mexicanos, continuar por la senda del autoritarismo con una posible presidenta que no tiene presencia propia y que solo sigue órdenes y disposiciones del  caudillo, o elegimos a quien pueda ser presidenta de todos los mexicanos, que procede de la cultura del esfuerzo, y que sepa llevar al país por el camino del crecimiento económico, con un alto sentido social.

Una presidenta que preserve los apoyos asistenciales, pero les incremente dinámicas de prosperidad y desarrollo que apoye en serio a las clases más desprotegidas, y que estos mexicanos y mexicanas dejen de ser solo carne de cañón electoral.

(*) Jorge Villanueva Hernández, empresario e inversionista en Puerto Vallarta y Bahía de Banderas.

This div height required for enabling the sticky sidebar