By Por Rafael Delgado Gutiérrez/Tepic
Personal de la Secretaría de Salud del Estado que aceptaron su cambio al modelo IMSS-Bienestar, bajo la promesa de que tendrían una base, se manifestaron en Palacio de Gobierno para reclamar que, a través de WhatsApp, les notificaron que ya no se presentaran a laborar y que ya no había presupuesto para pagarles.
Esto motivó la inconformidad de 186 trabajadores porque también no se cumple el compromiso del presidente de la República, de basificarlos.
Sin embargo, los inconformes, fueron recibidos por funcionarios de la Secretaría General de Gobierno, concretamente con la licenciada Isis, quien estableció el compromiso de que el próximo lunes o martes, los recibiría la titular Rocío Esther González García, informó el vocero de los trabajadores Felipe Hernández.
“Estamos viendo el apoyo con el señor gobernador para que nos dé una solución en referencia a la situación laboral que son las bases en su nuevo protocolo de salud, que es IMSS-Bienestar”, subrayó.
Calificó de buena la atención por parte de las autoridades a través de la Secretaría General de Gobierno, donde les dieron una explicación sobre sus demandas y decidieron esperar la respuesta, puesto que su intención no es afectar a nadie, ni a la sociedad y tampoco la agenda del gobernador.
Aseguró que la mayoría de los trabajadores tienen antigüedad desde 5 hasta más de 20 años de laborar en la Secretaría de Salud bajo contrato y es injusto que después de aceptar el cambio a IMSS-Bienestar con la promesa que serían basificados, les salgan el pasado 31 de octubre, a través de un mensaje de WhatsApp, con que están despedidos porque se les acabó el presupuesto.
Felipe Hernández sobre este mensaje, afirmó que nadie se pronunció y el secretario de Salud, Francisco Munguía Pérez, no les dice nada al respecto, tocaron puertas y nadie sabe nada, enfatizó. Precisó que los 186 trabajadores despedidos laboraban en clínicas y hospitales de todo el estado, con la distinción de estar capacitados, por ejemplo, en el manejo de residuos y la notificación que les enviaron, sin ser oficial, les pareció una burla.
Incluso, mencionó que hay una empresa que les ofrece un contrato y no saben cuánto les puede pagar, tampoco sabe los horarios y menos que tengan la garantía de los derechos que tienen.
Es decir, admitió, en su momento aceptaron de pertenecer a la Secretaría de Salud del Estado, a ser parte del modelo IMSS-Bienestar, con un sueldo más bajo que el que recibían bajo el compromiso de basificarlos sin que las autoridades responsables cumplieran con esta promesa y así contar con estabilidad laboral, refirió finalmente.
