Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas

Pobladores de Emiliano Zapata en Punta de Mita, principalmente los restauranteros de la zona El Anclote, tienen una larga lucha para hacer que se recupere la playa que se perdió debido a las construcciones de espigones para retener arena, que sirva a los turistas que ocupan hoteles y condominios de lujo.

Desde hace más de 30 años, cuando el pueblo de Nuevo Corral del Risco se ubicó en esa parte de la zona de Punta de Mita, los restauranteros gestionaron ante diversas instancias del gobierno federal para que se hiciera un espigón, que evitara la erosión de la zona de playa, pues los turistas se retiran del lugar por la falta de arena.

Los desarrolladores de Grupo Dine también participaron en las gestiones y de hecho se hizo el espigón, pero no fue suficiente porque se hicieron varios espigones más, para la dársena de resguardo de las embarcaciones de pescadores y prestadores de servicios turísticos que realizan paseos al Parque Nacional Islas Marietas.

El hecho es que la zona de playa frente a la zona restaurantera de El Anclote, sigue erosionada y la mayor parte del año está tapizada de piedra, por lo que los turistas evitan meterse al mar y prefieren buscar una playa más amable y ante tal situación los restauranteros se han ingeniado para mejorar el aspecto.

Según refirió el señor Juan Manuel Pelayo, uno de los primeros empresarios que se instalaron en esa playa, han tenido que comprar periódicamente varios camiones de arena para depositarla y esparcirla a lo largo de la playa y mejorar el aspecto de la misma, para que los turistas extranjeros puedan bañarse.

Hoy, la zona de playa de El Anclote cuenta con tres o cuatro espigones, que son insuficientes para canalizar arena a la playa, aprovechando la dinámica de las corrientes que existen en la zona de Punta de Mita y por ello los restauranteros realizan un esfuerzo adicional, para tener arena en la playa.

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