By Por Miguel Ángel Ocaña Reyes/Puerto Vallarta
Caos vial, turístico y aéreo, así como protestas, indignación, conatos de bronca y anarquía es lo que se vivió durante el cierre de la avenida Francisco Medina Ascencio, frente al verificentro, por parte de un grupo de manifestantes que protestaron por la verificación vehicular.
El bloqueo afectó a miles de personas, estudiantes, trabajadores, turistas y ciudadanos en general, tanto de Puerto Vallarta como de Bahía de Banderas, quienes se mostraron furiosos y frustrados por el hecho de perder clases, el día de trabajo o vuelos en el aeropuerto internacional.
La indignación fue más por la falta de acción de las autoridades para resolver a la brevedad un problema que se prolongó durante más de siete horas y que concluyó con la clausura del inmueble sin determinarse exactamente bajo qué motivos.
La manifestación dio inicio a las nueve de la mañana con la participación de dos colectivos que reunieron un aproximado de 300 personas, sin embargo, al tomarse la decisión de cerrar las vialidades en ambos sentidos de la Medina Ascencio, el grupo se dividió, quedando apenas un centenar de personas que mantuvieron a la ciudad y a la región en jaque.
Se llegó a estimar que la fila de automóviles llegaba hasta Sayulita y que alrededor de la zona donde se encontraba el cierre de las vialidades había un caos total que el personal de tránsito no logró controlar.
Tras varias horas, el secretario general del Ayuntamiento de Puerto Vallarta acudió a dialogar, sin embargo, los manifestantes se mantuvieron en su posición de no moverse hasta hablar con el alcalde, Luis Michel.
Horas más tarde se presentó el síndico municipal con los mismos resultados, dejando en espera a los descontentos durante prácticamente dos horas más y con la promesa de la llegada del alcalde.
Luego de transcurrir una hora más los ánimos se caldearon en diversas discusiones entre las personas que ahí se encontraban, hasta que llegó personal de Reglamentos Municipales a colocar los letreros de “clausurado” al verificientro, con lo que se abrió la vialidad.
Sin embargo, el problema no terminó ahí, sino que todavía durante al menos una hora el caos vial en las avenidas circundantes continuó debido a las rutas alternas que llenaron los conductores.
Cabe destacar que en cuanto a los vuelos, solo se retrasaron las operaciones, aunque fueron cientos los turistas de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas que perdieron el avión.
