By TERCERA LLAMADA
Por María José Zorrilla
Ayer fue un día de marcha y movilización en distintos puntos del país para defender al INE. No todas las ciudades ni todos los organizadores tuvieron la misma convocatoria.
Para algunos comentaristas la de Puerto Vallarta ha sido la marcha más abundante y contundente de los últimos años, pero lo más importante es que la voz de un sector de México se hizo escuchar.
No importa la crítica siempre agria de los que apoyan las iniciativas de AMLO a ojos cerrados. Pareciera haber una confusión entre lo que significa la Institución como tal por un lado y los sueldos de quienes la dirigen.
Estamos viviendo una situación obtusa en un país donde los detractores del INE llegaron al poder por que el INE ejerció su función de manera libre, transparente y legal y ratificó el triunfo acorde a lo que los ciudadanos decidieron. Entonces dónde esta el pecado del INE.
Será el sueldo de sus dirigentes, será la asignación de presupuestos a los partidos políticos o simplemente se trata de apoyar al líder sin hacer análisis alguno. Tal vez la palabra mágica sea corrupción.
Si lo dijo AMLO no hay duda. La corrupción está presente y hay que destruir lo que sea y como sea. Y sí, en efecto, la corrupción ha sido parte de nuestros sistemas políticos y no se salva ninguno ni ayer ni hoy.
El asunto de los sueldos debe analizarse, pero los que peleamos por mantener las instituciones que le den libertad al ciudadano para elegir, no hemos sabido permear nuestra inquietud a otros círculos más allá de una reducida masa crítica que ve peligrosa esta desaparición.
Durante el evento de inauguración de la Celebración de las Letras organizado por la Biblioteca Los Mangos el fin de semana, se presentó un cantautor de apariencia descuidada. De pronto nos desconcertó a gran parte de la audiencia ver unos jóvenes raperos. Acostumbrados a otro tipo de ritmos musicales más de uno pensamos levantarnos, pero no lo hicimos por discreción y respeto a la Biblioteca.
No pasaron más de 5 minutos cuando los tres raperos lograron atraparnos con su música. Nunca me ha gustado ese género de música, pero la letra y los arreglos de coros que lograron estos jóvenes nos cautivó por la profundidad del mensaje de esa poesía nueva.
En cuestión de 20 minutos el ambiente se fue transformando porque los chicos que empezaban a llegar coreaban la letra. Me pareció sensacional una convivencia totalmente heterogénea entre jóvenes de la calle, estudiantes y autoridades, abstraídos por las composiciones de César Andearan y Mds Crew. En la noche me quedé pensando qué había pasado.
Tania Mancha y su equipo han planteado una forma diferente de programar actividades culturales para acercar a nuevos creadores y espectadores. Por generar un sentido de pertenencia y comunidad.
Hay una preocupación por seleccionar propuestas atractivas y plurales. Por romper esquemas, tabús y estereotipos que tanto daño nos han hecho.
El país necesita derribar las peligrosas fronteras que hemos permitido trazar entre unos y otros. Marchar por defender al INE no nos hace ser parte de los corruptos ni los fifís.
El campo es muy amplio y de este y del otro lado hay de unos y otros. Como en el rap o en la música clásica, hay músicos buenos y otros no tan buenos. Lo que nos ha faltado a los que no estamos a favor de muchas de las formas de la 4T es atraer nuevos públicos y romper la barrera de los estigmas.
Adentrarnos al territorio de la razón con el talento que nuestro rapero local logró con tanto éxito. Ni todo lo realizado por AMLO es malo, pero tampoco debe ser intocable lo que proponga el Peje.
Que suene la voz del rapero y del bolero. Que se escuche el mariachi, el rock y la ópera. Solo se trata de entonar el mismo Himno Nacional como símbolo de unidad. Por falsos prejuicios no podemos despedazar al país en un rompecabezas geográfico, económico y social que nos hunda en una trágica confrontación.
