Por Eugenio Ortiz Carreño/Bahía de Banderas

La parte más antigua del fraccionamiento náutico turístico residencial Nuevo Vallarta realmente parece una ciudad aparte, pues no solo se distingue por su marina y el canal cercano, sino también por una propuesta arquitectónica novedosa, y un ambiente tranquilo y relajado, con varios restaurantes de excelente calidad.

Todo inició en lo que se conoce como la playa de Villa Varadero hace cincuenta años, que por cierto están pasando materialmente desapercibidos por los hoteleros, los desarrolladores de condominios, incluso los restauranteros y todos los que han disfrutado de su ambiente y situación.

Este rincón que también es poco conocido hasta de los mismos habitantes de Bahía de Banderas, se localiza al terminar el bulevar Nayarit, en la glorieta de la calle Las Moras, la cual fue cortada por los desarrolladores de Vidanta y de Paradise Village, que la convirtieron en una privada para acceso de su personal, aunque también da servicio a los visitantes para llegar a los hoteles del fondo.

Justo a la altura de la glorieta, donde está uno de los sitios de taxis más grandes de la zona, cuyos choferes cuentan con cafetería y pantallas de televisión, se encuentra la plaza con su correspondiente quiosco. casi sobre el canal el condominio Porto Bello y a un lado se encuentran las instalaciones de Vallarta Adventure y el restaurante del pintor Federico León de la Vega.

Al seguir caminando, hasta el condominio Ocean Vista Residences, pasando la calle Hidalgo, el visitante se encuentra con una de las ventanas al mar mejor equipadas, pues cuenta con regaderas, y un pequeño andador sobre un espigón de aproximadamente 200 metros, que lo lleva “mar adentro” y el cual brinda una novedosa sensación al caminar con el mar a los lados, para llegar hasta un pequeño faro o boya que sirve para la navegación.

En estas fechas la marina de Nuevo Vallarta luce abarrotada de yates y barcos particulares, que se pueden admirar desde el pequeño malecón de unos 400 metros, que corre frente a pequeños hoteles y condominios. En este punto se puede admirar uno de los distintivos icónicos de esa área que es la vela de un barco, realizada en metal pulido.

Alrededor se han levantado varios edificios condominiales, algunos con una arquitectura diferente para llamar la atención de los visitantes. Esta es una zona que cada día adquiere mayor atractivo, como un espacio tranquilo y agradable.

This div height required for enabling the sticky sidebar