Por Eugenio Ortiz Carreño/Puerto Vallarta

Inspirado en Pedro Páramo, obra de Juan Rulfo, Vicente Antonio Villalvazo Monroy escribió su novela dedicada a los “pata salada” de Puerto Vallarta, pueblo al que llegó hace tres años y de inmediato se dedicó a recabar “retazos” para una historia a la que finalmente le dio forma de novela.

De Acapulco han llegado a Puerto Vallarta lo mismo conocidos meseros, gerentes de hoteles, cocineros de restaurantes famosos, chefs destacados y ahora llegan también escritores. Es el caso de Vicente Antonio Villalvazo Monroy, quien llegó hace solo tres años y desde el inicio comenzó a idear una historia y el resultado fue una novela que tituló “Pata Salada”.

En ella relata la historia de una familia que desde la zona de Compostela emprende la aventura de caminar hacia el sur y cruzan zonas montañosas y los caudalosos ríos, como el Ameca y llegan hasta el Puerto Las Peñas, donde llegan a residir y donde reciben precisamente ese apelativo de “pata salada”.

De hecho, comentó en su exposición ante el público que acudió a la presentación de su libro, no tiene fecha fija de cuando inició a recopilar datos, porque tiene unos tres años cuando empezó a hacer borradores y amalgamar textos, hasta que se armó el rompecabezas dando como resultado la novela de Pata Salada.

“Mi maestro es Juan Rulfo, porque aunque no lo conocí, de él aprendí su narrativa, leyendo Pedro Páramo y Juan Gallo, a pesar de las dificultades para hacer la historia de una comunidad, cuando uno se lo propone, nada es difícil, porque empecé a investigar a investigar, hasta juntar todo lo que era la amalgama”.

ENAMORADO DE VALLARTA

Al ser entrevistado en el centro Cultural Cuale, reconoce ser originario de Acapulco, Guerrero, y añade “soy uno de tantos migrantes que han llegado a Puerto Vallarta, y estoy enamorado de Puerto Vallarta, porque desde el primer día que me dijeron pata salada, me quedé con la duda de qué significaba esa adjetivo e investigué mucho y hasta que junté todo el rompecabezas, hasta que resultó la historia”.

“Entendí que pata salada se le llama a las personas que son netamente locales” y por eso invita a la población en general a leer su novela, porque se van a enamorar de Pata Salada.

Precisó que realmente los pata salada son los que viven aquí, los nativos, pero hay quienes han migrado, igual que los personajes de la novela han llegado a vivir a este lugar tan bonito y se dice que “quien llega a beber agua del Cuale” ya no se va.

El editor del libro, Joel Huacuja, integrante de una familia de periodistas entre la que destaca su tío don Mario Huacuja, también se siente atraído por la magia de Puerto Vallarta y reconoce que la novela es muy buena y por ello aceptó editarla.

Joel Huacuja tiene 40 años de periodista y trabajó en Ocho Columnas, en el Diario, el Jalisciense y Siglo 21 aparte de muchas revistas y hace como 30 años empezó como editor de libros.

“Hago libros por encargo para Plaza Editores. Antonio Villalvazo nos contactó y vi el manuscrito y vimos que tiene valor, sobre todo la relación histórica que hace y describe a Puerto Vallarta lo que es hoy, a 100 años de haber sido una delegación, una comisaría de San Sebastián del Oeste y de Mascota, ahora es una ciudad, un gran puerto y sobre todo la calidad de la gente tiene algo muy diferente”.

Refiere también la leyenda de que “quien bebe agua del Cuale ya no se va” o mejor dicho, se queda a vivir en Puerto Vallarta.

Historias hay de gerentes de hoteles o de restaurantes o vendedores de ferretería o equipo eléctrico que igual llegan y ya no se van.

Refiere el caso de un conocido que es gerente de una tienda de materiales de construcción, que antes había sido gerente de producción de Milenio y lo mismo, se vino y no regresó, “lo conocí, nos maquilaba un periódico y un día se vino y no volvió”.

Reconoce Joel Huacuja que la situación es difícil para los editores de libros, pero viene el fenómeno de las librerías y aunque muchas librerías pequeñas desaparecieron, las grandes quedan, son consorcios grandes como Gandhi y otras, pero para los autores independientes es difícil acceder a ellas.

Como editor refiere que decidieron apoyar a escritores noveles y “tenemos editados varios libros, como 20 libros de febrero para acá, porque no cobramos la edición, ni el diseño, ni la portada. Las editoriales son caras, solo la corrección cobran a 50 pesos por página y un manuscrito de 100 páginas, son 10 mil pesos, solo de la corrección, más otros 10 mil del diseño editorial, o sea se eleva mucho el costo y un escritor no puede y por eso ha nuestra editorial ha funcionado porque no cobramos esos conceptos”.

presentannovelapatasalada2 1024x768 - Presentaron la novela “Pata Salada”, obra de Antonio Villalvazo Monroy
presentannovelapatasalada3 768x1024 - Presentaron la novela “Pata Salada”, obra de Antonio Villalvazo Monroy
presentannovelapatasalada1 1024x768 - Presentaron la novela “Pata Salada”, obra de Antonio Villalvazo Monroy

This div height required for enabling the sticky sidebar