By CRÓNICAS DE VIAJE
Por Jorge Villanueva Hernández
Ya instalados en el Hotel Jade imperial, salimos a cenar. Reservamos en un excelente hotel en la zona vieja de Hanói, que es la capital de Vietnam. El guía que nos va a acompañar estos 6 días es un vietnamita con estudios en letras, simpático e interesante personaje, con un excelente español ya que vivió 6 años en Cuba.
Conocer la historia milenaria de Vietnam, su arquitectura, sus templos, sus mercadillos, pero sobre todo vivir su desorden y probar su famosa gastronomía son solo algunas de las cosas para ver y hacer en Hanói.
Cuando te preguntas: ¿Y cómo es Hanói? Hay que pensar en una ciudad grande, desordenada, llena de puestos callejeros y vendedores ambulantes con un tráfico caótico donde las señales de tránsito solo se usan como adorno.
Con una infinidad de motos, se dice qué hay 5 millones de motocicletas en Hanói. Todas las mujeres manejan motocicleta y se disputan las calles al igual que los varones. Cruzar cualquier calle es una verdadera odisea, ante el tumulto de motos y automóviles.
La mejor forma de gozar de esta caótica y maravillosa ciudad es con la compañía de un guía local con estudios en la historia del país y un excelente conocimiento de nuestro idioma. Y en contraste, la zona rural es bellísima, con huertos de autoconsumo y pequeños estanques para cultivo de peces comestibles. El Valle de Mai Chau aparece como una alternativa increíble para conectar con la naturaleza y la cultura de la zona. Y no se puede dejar de visitar la bella Bahía de Ha-Long que es Patrimonio de la Humanidad.
Vietnam y su capital Hanoi son un dragón con dos cabezas que avanza frenético a velocidad vertiginosa. Una cabeza se debate entre mitos y leyendas, y trata de sobrevivir tras los ideales del paraíso comunista, paraíso que las nuevas generaciones ni recuerdan ni quieren saber del Vietnam heroico que supo sacar de su país a los franceses y a los norteamericanos.
La otra cabeza tiene sus metas puestas en la senda del capitalismo. El nuevo Vietnam es el país de las nuevas generaciones con el llamado nuevo período y mirando hacia una economía de mercado.
La historia dirá quién será la generación del siglo XXI que lleve a Vietnam a un futuro mejor para todos los ciudadanos de este milenario y bello país.
